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Jul 19, 2023

Recicladoras mexicanas aumentan capacidad de empacado de metales

México ha tenido un sector manufacturero en crecimiento durante varias décadas, proporcionando una

México ha tenido un sector manufacturero en crecimiento durante varias décadas, lo que proporciona una de las razones por las que sus volúmenes de generación de chatarra ferrosa y no ferrosa nutren un mercado para empresas de reciclaje exitosas y en crecimiento.

En particular, Monterrey, considerada la tercera área metropolitana más grande de México, se ha beneficiado de la presencia de "maquiladoras", o fábricas y plantas de ensamblaje establecidas allí por empresas multinacionales para estar cerca de la frontera con Estados Unidos.

"Monterrey ha atraído con éxito una base comercial diversificada, que incluye empresas internacionales de los [sectores] aeroespacial, automotriz, electrónico, de dispositivos médicos e industrial", dice el sitio web MaquilaReference.com.

Dos empresas de chatarra con sede en o cerca de Monterrey que han disfrutado de acceso a la importante base industrial han invertido cada una en capacidad de empacado para ayudarlos a preparar y enviar el flujo constante de chatarra en la región norte de México.

Dimeca Metals en Monterrey opera una cizalla/empacadora de 800 toneladas de Lefort America, la unidad comercial con sede en Florida de Lefort SA, con sede en Bélgica. La instalación de la Lefort SB800 marcó la tercera y más grande cizalla/empacadora Lefort operada por Dimeca en México.

La empacadora cizalla SB800 cuenta con una tolva de carga, 800 toneladas de fuerza de corte, una caja de carga de 23 pies y un motor eléctrico de 230 kilovatios que alimenta las bombas Bosch Rexroth y un sistema hidráulico diseñado por Lefort.

Según un comunicado de prensa de Lefort America, el modelo se une a una cizalla/empacadora montada sobre orugas Lefort SB660 utilizada en las instalaciones de Dimeca en Guadalajara, y una Lefort SB770 utilizada en el patio de Dimeca en la ciudad siderúrgica de Saltillo.

Sobre la nueva SB800, el director ejecutivo de Dimeca, Ricardo de la Pena, dice: "Estamos muy contentos con esta máquina". Indica que la tasa de producción ha superado sus expectativas y que Dimeca puede cortar y empacar tipos de chatarra que antes no había podido procesar antes de la instalación de la máquina.

El reciclaje de chatarra no ferrosa ha desempeñado un papel más importante en el crecimiento de RIISA, que tiene su sede cerca de Monterrey. La empresa familiar RIISA opera cuatro ubicaciones en México y ha sido leal a las empacadoras fabricadas por Imabe Iberica LLC, con sede en España.

Según Mauricio Llaguno Garza de RIISA, quien proporcionó información a Recycling Today para un proyecto de contenido personalizado de Imabe of America, RIISA tiene 12 empacadoras en su flota de procesamiento. El sitio web de la empresa enumera a Imabe y Harris, con sede en Estados Unidos, como sus proveedores de empacadoras.

RIISA tiene sus orígenes en la fundición secundaria de aluminio, pero ha crecido para manejar (y empacar) una amplia variedad de chatarra. Además de los grados de chatarra de aluminio, RIISA ahora compra y procesa chatarra de metal rojo, ferroso, acero inoxidable, zinc y plástico. “Siempre estamos en la búsqueda de nuevos materiales y mercados”, afirma la firma en su página web.

Llaguno Garza dice que las máquinas que RIISA ha adquirido de Imabe of America, con sede en Florida, son "confiables, libres de preocupaciones y muy fáciles de operar".

La economía mexicana enfrenta los mismos desafíos que otras en todo el mundo al tratar de recuperar el impulso perdido por las interrupciones relacionadas con el COVID-19.

La nación tiene un régimen comercial regional estable en la forma del Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA), y su gobierno actual ha iniciado un gasto considerable en infraestructura. Idealmente, las circunstancias económicas mantendrán los equipos de corte y empacado de metales de México, y las empresas de reciclaje que los operan, funcionando durante 2021.